Agentes de la Ertzaintza detenían, en la mañana de ayer en la localidad de Portugalete, a un varón de 75 años bajo la acusación de un delito de robo con fuerza. El sospechoso, presuntamente, habría forzado el acceso a una lonja con intención de llevarse los muebles que había en el interior, pero era sorprendido.
Sobre las once y media de la mañana de ayer, una patrulla de la Ertzaintza, que realizaba labores de protección ciudadana por la localidad de Portugalete, era informada por su Centro de Coordinación para que se dirigiera a la calle Reyes Católicos, ya que al parecer alguien había forzado el acceso a una lonja con intención de robar, según el aviso de su propietario.
Personada en la dirección indicada, los agentes se encontraban con dos varones a la entrada de la lonja. Preguntados por la razón de su presencia en el lugar, uno de ellos afirmaba trabajar para el otro varón quien, a su vez, aseguraba ser el propietario de la lonja, y que estaba allí para llevarse unos muebles que guardaba en su interior.
Los agentes se daban cuenta de que la cerradura de la persiana que protegía la lonja había sido forzada, por lo que realizaba diversas preguntas al supuesto propietario ante las cuales éste era incapaz de ofrecer respuestas creíbles.
Poco después llegaban al lugar los verdaderos propietarios de la lonja, quienes acababan de desmontar la versión del supuesto ladrón.
Ante estos hechos, los agentes identificaban al sospechoso como un varón de 75 años de edad y, después de realizar las oportunas comprobaciones, procedían a su detención bajo la acusación de un delito de robo con fuerza.