Pasadas las diez y media de la mañana de ayer, una patrulla de la Ertzaintza que realizaba labores de seguridad ciudadana por el centro de la localidad jarrillera detectaba la presencia, en la calle Carlos VII, de un varón que se comportaba de forma sospechosa, en actitud vigilante, mirando constantemente a derecha e izquierda y con repentinos giros para controlar lo que ocurría a su espalda.
Ante esta escena, los agentes decidían identificar al varón. Al hacerlo, el individuo mostraba un estado de gran alteración nerviosa. Al realizarle un registro preventivo, los ertzainas localizaban, distribuidos entre sus calcetines, un total de cuatro trozos de una sustancia marrón, probablemente hachís, con un peso total estimado de unos 130 gramos.
Además, los agentes encontraban en su poder 210 euros repartidos en billetes de 10 y 20 euros.
Por todo ello, tras identificar al individuo, un varón de 34 años de edad, los ertzainas procedían a su detención bajo la acusación de un delito de tráfico de drogas.