20 serán los contratados durante 6 meses; es uno de los programas dentro del plan de empleo local.
Coordinados con la policía municipal, se encargarán de recoger las incidencias que se puedan producir en la calle, velando por el cumplimiento de las normas básicas de civismo.
Se trata de una figura diferente a los vigilantes de ordenanza, que se centran en tareas de tráfico, el control de la venta ambulante y la vigilancia de parques y jardines.