Organizado por el Ayuntamiento, la sociedad Sestao Berri, la asociación vasca de patrimonio industrial, la asociación cultural 3K y el nuevo colectivo de hosteleros de Txabarri, pretende servirse de un elemento de gran valor patrimonial, como es el Horno Alto, para dinamizar el barrio, atrayendo al resto de vecinos de la localidad.
Entre las actividades programadas, una ruta de Pintxo–Pote rememorará épocas pasadas en las que los bares obsequiaban a sus clientes, principalmente cuadrillas de trabajadores , con un “txusko” de pan acompañado por chorizo, morcilla o sardinas.