Los 2 nuevos vehículos eléctricos de la guardia urbana entraron en funcionamiento el 9 de marzo, y la semana pasada uno de ellos quedaba ya fuera de servicio.
Presenta un importante golpe en el frontal y otro más en la puerta del puesto de conducción.
No obstante, los daños no son fruto de ninguna persecución policial, sino más bien de la inexperiencia.
2 agentes han resultado heridos y han cursado baja, al intentar parar el vehículo del que se habían bajado sin que quedase activado el punto muerto.
Trataron desde fuera de activar el freno de mano, pero en este tipo de coches la palanca no funciona una vez está en movimiento; los agentes desconocían este dato.
Al introducirse de nuevo en el vehículo, saltaron los airbags y es, entonces, cuando sufrieron las heridas; una policía tuvo que recibir varios puntos de sutura.
El vehículo chocó primero contra unos pivotes y, después, se empotró contra un macetero de la calle Asunción Menéndez, a punto estuvo de impactar contra un edificio.
Fuentes policiales han explicado a la redacción de TELE7 que los agentes no han recibido ningún tipo de formación para este tipo de coches de marchas automáticas.
Tampoco los consideran los más adecuados para intervenciones en las que precisan bajarse rápido del vehículo.
El coche se adquirió mediante Renting por lo que se solicitará un vehículo de sustitución.
Los 2 vehículos eléctricos fueron adquiridos por un periodo de 4 años por 79.000 euros.