La tradicional sardinada ha sido este año del agrado de todos, pues se ha organizado de forma que nadie podía “colarse”.
La espera debía hacerse en fila; lo que ha evitado las habituales aglomeraciones.
La tradicional sardinada ha sido este año del agrado de todos, pues se ha organizado de forma que nadie podía “colarse”.
La espera debía hacerse en fila; lo que ha evitado las habituales aglomeraciones.