Llama la atención la presencia de mesas y sillas en el recinto de txosnas de Barakaldo.
Hay a quien le gustan las terrazas y a quien no, pero lo cierto es que se hace difícil encontrar hueco para sentarse.
Llama la atención la presencia de mesas y sillas en el recinto de txosnas de Barakaldo.
Hay a quien le gustan las terrazas y a quien no, pero lo cierto es que se hace difícil encontrar hueco para sentarse.