Son planchas de fibrocemento, que en otro tiempo conformaban el tejado de un pabellón de Zubileta, y que se encuentran esparcidas a la intemperie.
El amianto es un material inerte mientras se mantenga estable pero se le considera peligroso para la salud a medida se deteriora; inhalar o respirar sus fibras puede provocar cáncer de pulmón.
Desde el área de disciplina urbanística del Ayuntamiento de Barakaldo se ha requerido “en múltiples ocasiones” a los propietarios para que tomen medidas de cara a evitar la entrada de personas ajenas, advirtiéndoles de que se enfrentaban a duras sanciones.
Esos requerimientos han dado sus frutos, y los bancos, que, tras la quiebra de la empresa son los dueños actuales del solar , han contratado a unos trabajadores para la colocación de un vallado.
Las planchas de uralita son los únicos restos que quedan del pabellón de Mebunik; el tejado se vino abajo tras el robo de los pilares metálicos , previsiblemente, para su posterior venta como chatarra.