Ocurría ayer domingo por la tarde cuando ondeaba la bandera roja, indicativa de que el aforo estaba completo.
Se trata del momento en que llega a la playa el autobús procedente de Barakaldo.
Bajan del vehículo una veintena de viajeros, que tienen intención de pasar una tarde de playa, y nada se lo impide, ni siquiera el vallado instalado por el ayuntamiento de Zierbena.
En las imágenes se aprecia a un grupo de personas que, haciendo caso omiso a las vallas que deberían impedir el acceso al arenal, se introducen en la playa, hamaca y sombrilla en mano; algunas, incluso, bordean el vallado por las terrazas de los bares.
Esto ocurre en la parte del arenal perteneciente al municipio de Zierbena, donde, una vez activado el protocolo por aforo completo, se da aviso a la Ertzaintza, que bloquea los accesos por carretera, pero sólo se instalan vallas y no hay presente ningún agente de la autoridad.
Por el contrario, en la parte de Muskiz, el ayuntamiento sí controla sus accesos al arenal con el apoyo de los auxiliares de policía contratados este verano al efecto y por la propia policía municipal.
Zierbena, que carece de policía local, aunque sí tiene alguaciles en su plantilla municipal, alega falta de recursos para poder atender los accesos a la playa en los momentos de mayor masificación.