Una situación que, debido ,principalmente, a los altos precios de los alquileres, se registra 4 veces por semana en la localidad.
En su caso, el propietario del piso quería recuperarlo y con las ayudas sociales que reciben no les alcanza para pagar otro alquiler.
El colectivo Berriotxoak denuncia que en Barakaldo el protocolo anti-desahucios es “papel mojado”.