La rotura de una tubería en la comunidad de propietarios contigua a su vivienda le ocasionó hace 4 meses una importante inundación, que, a su vez, ha dado origen al desprendimiento completo del techo de la cocina y a importantes daños en su dormitorio.
Ambos espacios han quedado inhabitables y, desde entonces, María se ve obligada a dormir en el sofá.
Sufre ansiedad por el miedo a que se desprendan nuevos elementos y resulte nuevamente herida; ya que ha resultado lesionada en 3 ocasiones.
Con 74 años, cobra una pensión baja y, mientras los seguros se ponen de acuerdo, no puede permitirse pagar un alojamiento.
Ha recurrido a los servicios sociales municipales, que, aunque han visto las condiciones insalubres en que vive, de momento, no le han ofrecido alternativa.