El pleno ha tomado la decisión de no abordar un nuevo plan de euskera municipal a la espera de que Gobierno Vasco fije las nuevas directrices a nivel de Euskadi.
El grupo municipal de EHBildu, aunque ha apoyado la propuesta, ha sido crítico con la política de euskera en el municipio, instando al Ayuntamiento a «poner los medios necesarios».
En este sentido, la coalición abertzale ha denunciado que buena parte de la programación destinada a juventud es en castellano.