Después de dos años de trabajo, el proyecto de “la huertaka” ha permitido sanear una zona abandonada, llena de basura y zarzas.; el terreno de las antiguas casas de los ingleses de Lutxana es hoy en día un huerto urbano de gestión colectiva abierto a todos los vecinos de Barakaldo.
Sin embargo, sus promotores denuncian que la Huertaka ha sufrido actos de vandalismo continuos en los últimos meses. Para empezar, antes del verano alguien se dedicó a vaciar sistemáticamente el principal depósito de agua de la huerta, haciendo muy difícil el riego. Por otro lado, alguien se ha dedicado a coger, romper y tirar por toda la zona todas las berenjenas, casi todas las calabazas y parte de los tomates que ha ido dando la huerta.
También han desaparecido numerosos pallets que iban a ser usados para mejorar las instalaciones, así como uno de los bancos de madera destinados a los vecinos que acuden a disfrutar del espacio; y tampoco es raro encontrar basura tirada por el suelo.
Los impulsores de la Huertaka piden respeto y recuerdan que se está estropeando un espacio pensado para el disfrute de todos y que el género destrozado es alimento que ya nadie va a poder comer .