Han sido años de multas y embargos, así como cuantiosos gastos judiciales y veterinarios tras las incautaciones.
No descartan pedir reclamar daños y perjuicios porque se han sentido “atropellados” por la Diputación.
Creen que el ente foral ha reculado porque han sido 6 los juicios que le han ganado.
No obstante, los ganaderos acogen con cautela el cambio de naturaleza jurídica del llamado Monte 500 porque, en su opinión, el nuevo plan foral para regular las parcelas debe incluir,obligatoriamente, el reconocimiento del histórico derecho a pastos de los habitantes de la Zona Minera.