A juicio de la portavoz nacionalista, Amaia del Campo, el alcalde utilizó una de sus “triquiñuelas habituales”: convertir la moción en ruego.
Y es que en palabras de su portavoz, Amaia del Campo, esa cifra no es real. El consistorio todavía tiene que pagar 1,5 millones por la finca Munoa; las obligaciones pendientes con los trabajadores municipales ascienden a 4,3 millones y también están pendientes de abono varias sentencias judiciales.
Una representación de alumnos y profesores de estos países ha estado esta semana en Barakaldo trabajando en el proyecto.
El área de turismo ha convocado un concurso de autofotos, ligado al último video promocional del municipio.
El portavoz de alcaldía, Carlos Fernández, ha explicado que esta decisión viene contemplada en el reglamento Orgánico Municipal.
Una moción presentada por el PP que ha sido aprobada por unanimidad en el pleno.
Además, los populares solicitaban que sólo las personas con residencia legal en el Estado pudieran acceder a estos pisos. El PP, en palabras de su portavoz Amaya Fernández, también proponía exigir 5 años de empadronamiento previo en Barakaldo y que no pudieran ser beneficiarias las personas con antecedentes penales por delitos muy graves.
De esta manera los beneficiarios abonarán un alquiler, en función de su renta, cuando en la actualidad no pagan nada al consistorio. El ayuntamiento dispone en la actualidad de 123 viviendas a disposición de las personas más necesitadas.
